. Decir que el sueño roto nos rebasa es solo un juego poco interesante
con el que despreciar más adelante
la señal que nos manda y nos abrasa.
. El olvido será nuestra vacuna salvando todavía la oportuna
beldad que todo tiene y que nos nombra.
. Le diremos adiós a aquellos días
porque vamos en busca de alegrías
marchitas por las horas en la sombra.